viernes, 30 de septiembre de 2011

REHABILITACIÓN DEL HALL_Col·legi EL CARME de Mollerussa









Un verano más nos ponemos manos a la obra en el encargo de la Fundació Privada EL CARME de Mollerussa, en este caso, para la rehabilitación integral del hall principal. Con tan solo dos meses y medio de plazo -lo que serian las vacaciones escolares- modificamos por completo el estado actual de la zona de actuación (hall, una clase, tres tutorias y dos despachos) mediante la colocación de nuevos materiales y la creación de un espacio cálido y acogedor.

La utilización de iluminación indirecta por medio de tiras de leds proporciona una sensación de tranquilidad, más que necesaria en un recinto escolar. El contraste de la luz fria con el material escogido en revestimiento y pavimento -piezas de 60x40cm de piedra basáltica- es notorio, y a su vez, realza las características físicas de la piedra.

El hall queda dividido en dos partes diferenciadas, motivadas por las dos entradas desde el exterior. Para ello, se ha diseñado una mampara de madera en tiras de haya vaporizada, con separación suficiente entre ellas para permitir la completa visión de un espacio a otro. Ésta se sustenta en una jardinera de 50cm de altura, provista de luz perimetral incrustada en pavimento, pasando a ser un elemento principal del entorno.

Por expresa decisión de la Reverenda Madre, se construyó una hornacina, que me permitia seguir con el plano de pared limpio y donde se colocó la Mare de Déu del Carme, iluminada en su parte superior con una tira de leds.

La simplicidad geométrica, la sencillez de materiales y la escasez de mobiliario, convierten el nuevo espacio en un espacio libre, amplio y suave a la vista.

Una vez más, mil agradecimientos a todos los participantes en la obra por su profesionalidad y trabajo, así como a la Reverenda Madre Antònia, que me brinda total libertad en mis decisiones, a menudo más peligroso que beneficioso, aunque en este caso el resultado final se ha considerado existoso.


Un saludo,

Jordi Carner

arquitecto técnico e ingeniero de edificación






domingo, 4 de septiembre de 2011

SAINT BERTRAND DE COMMINGES



Recientemente, y de sorpresa, me encontré paseando con mi familia por un pueblecito francés realmente atractivo. Saint Bertrand de Comminges. En esta pequeña localidad, situada en el Midi Pyrenees, a unos 45min. del Valle de Arán, se encuentran restos de un poblado romano y una huella arquitectónica de civilizaciones posteriores digna de ser visitada.

Así nos encontramos con la catedral de Notre Dame, una majestuosa construcción que combina los estilos románico y gótico, así como, en su fase final de construcción, con el movimiento renacentista.

En los alrededores de este municipio, también pueden visitarse las cuevas de Gargas, con pinturas del paleolítico superior.

En la zona urbana, se puede apreciar la aquitectura rural propia de la zona pirenaica, con similitudes más que apreciables con la que se puede encontrar en el propio Valle de Arán. Calles estrechas y angostas, casas de escasa altura, paramentos de mampostería de piedra, cerramientos porticados de madera, cubiertas de pizarra, y decoración exterior con numerosas plantas floreadas.

Una pequeña plazoleta plagada de tiendas de souvenirs, alguna cafeteria y un acogedor hotel, conforman el casco antiguo del pueblo.

Como curiosidad, diré que estuvimos tomando un refresco en un peculiar café con un particular dueño. El señor en cuestión es un contumaz forofo del FCBarcelona, con una decoración del local que supera los límites del barroco más profundo. Banderas, réplicas de copas, fotografias y demás objetos inimaginables con motivos blaugranas. El señor de carácter jocundo, y algo achispado, nos explicó, en un penoso español, algunas de las imágenes colgadas, sin previas preguntas.

El pueblo se visita en menos de una hora, pero merece la pena acercarse y disfrutar.


Un saludo,


Jordi Carner